Cuenta kilómetros

Tardamos 400 millas hasta encontrar entre los chiches de Jala Bien el cuenta kilómetros que pusimos en cero para que nos diga cuanto llevamos los tres juntos (Julián, Jala Bien y yo).
Así que siempre que lo vemos (generalmente para saber cuanto hay de ida a un lugar, o para ver si el nivel de la nafta es el que indica el medidor*) a lo que dice, le sumamos las 400.
Hoy marcaba 4.500 km, es lo que vamos recorriendo, a eso hay que sumarle también la parte del viaje en la que estábamos sin Jala Bien (desde la Ciudad de México a Chihuahua).
Al enorme D.F. llegamos el 11 de marzo, así que hace 3 meses y 5 días que estamos en México- eso nos hace pensar que la travesía se extenderá más de lo que pensamos en un principio.

Parece que estamos un poco distraidos con las fechas y tratamos de festejar todo el tiempo...
El 14 de Junio del año pasado, llegaba Juli con un bolso con libros y algo de ropa a Buenos Aires, para ver que hacíamos... hace un añito y unos días no nos despegamos..

*(el asterisco a algún lugar lleva... les cuento)
La mañana del cumple de Juli, - en Basaseachi, tierra de ley seca- al subir a Jala Bien, a quién manteníamos bien alimentado, el indicador de gasolina marcaba que quedaba muy poca... obvio, primera hipótesis para nosotros, acostumbrados a poner llave en las tapas (no como acá, que usan un botón desde dentro del auto, pero que si no lo apretás también se abre la tapa!) fue que alguien habíase servido de nuestro depósito lo que necesitaba (ni hace falta que cuente el humor que esto produjo contra el pueblito, la choza donde habíamos dormido y los vecinos)... Más allá de eso, tomando la hipótesis como buena, tuvimos que salir del pueblo antes de meternos en el parque de la cascada, en busca de una Pemex que nos abasteciera... oh sorpresa, a penas unos litros cupieron en el estómago lleno de Jala Bien! así que después de pedir disculpas mentales por los feos pensamientos para con los lugareños y aliviar el presupuesto del día; supimos que nuestro muy querido Jala Bien, puede mentirnos -sin mala intención- alguna que otra vez.

No hay comentarios: